El grupo de aves conocido como aves del paraíso, que incluye los impresionantes manucodes y riflebirds, se puede encontrar prosperando en los hermosos paisajes de Nueva Guinea y las islas circundantes. Estos tesoros tropicales residen principalmente en exuberantes bosques tropicales, incluidos bosques tropicales, pantanos y bosques cubiertos de musgo. Vale la pena señalar que se han descubierto algunas especies que viven en bosques de manglares cerca de la costa.
Las llamativas plumas de las aves del paraíso las han hecho populares entre los cazadores, lo que lamentablemente ha llevado a la extinción de algunas especies de esta familia. Durante generaciones, las comunidades indígenas de Nueva Guinea han utilizado estas plumas en sus tradiciones y vestimenta.
A lo largo de los siglos, las mujeres en Europa valoraban las plumas de las aves del paraíso como adornos de moda, lo que llevó a la matanza generalizada de estas aves. Además, la deforestación desenfrenada ha destruido sus hogares naturales, lo que ha provocado que muchas naciones las reconozcan como especies protegidas.
Las aves del paraíso son conocidas por su fascinante baile, que se suma a su ya extraordinaria apariencia. El baile del hombre es tan cautivador que no sólo capta la atención de las mujeres, sino que también deja a los espectadores hechizados. Estas fascinantes criaturas son realmente un espectáculo digno de contemplar.
Es fascinante observar cuánto esfuerzo ponen los machos de los pájaros del paraíso para encontrar pareja. Para construir sus nidos, utilizan materiales como hojas, musgo y zarcillos de enredadera y, a veces, eligen huecos en los árboles como lugar para poner sus huevos. La cantidad de huevos que ponen depende del tamaño de la especie, las aves más grandes producen un huevo y las más pequeñas ponen de 2 a 3 huevos por nidada.
Una vez puestos los huevos, tardan aproximadamente entre 16 y 22 días en eclosionar. Una vez que nacen, las aves jóvenes abandonan el nido cuando tienen entre 16 y 30 días de edad. Este es solo el comienzo de su increíble viaje en los diversos y prósperos hábitats que les sirven de hogar.